La utilidad de un moodboard

Un moodboard es un panel de inspiración formado por colores, texturas, tipografías, materiales, fotografías… que nos sirve para transmitir una idea, ambiente o pensamiento acerca de nuestra marca.

Todos esos elementos sirven de inspiración en un proceso previo al diseño de cualquier proyecto que tengas en mente.

Es una herramienta que a priori puede parecer algo simple pero que tiene un poder impresionante y que una vez que te acostumbras a emplearla al comienzo del proyecto, te resultará indispensable.

¿Por qué utilizar uno y cuándo usarlo?

– Por facilidad y utilidad. Te ayuda al principio de un nuevo proyecto, a enfocar todas las ideas que tienes en la cabeza, en la del cliente. Todo centrado y unificado en un solo lugar.

– Es una buena guía visual. Ya que una imagen es muy poderosa y podrás, con un recorrido visual, tener una idea clara del concepto central, la gama de colores, la tipografia, el estilo, cuál es el objetivo, etc.

¿Cómo hacer uno?

– Definir las palabras clave. Definir tres o cuatro palabras claves sobre lo que quieres expresar en el nuevo proyecto.

– Buscar imágenes. Una vez tenemos las palabras clave es el momento de buscar una gran cantidad de imágenes que nos ayuden a visualizarlas. Después seleccionamos que mejor nos encajen, evitando que se repitan o que no aporten valor.

– Tener en cuenta la colocación de los elementos. Una vez tenemos las imágenes y las palabras clave, el último paso es colocar los elementos en el mismo soporte con un orden que nos ayude a estructurar la información.

¿Cuál es el mejor soporte para un moodboard?

Dependiendo de tu forma de trabajar, el moodboard puede ser digital o hecho a mano.

– Digital, puedes crear tableros en Photoshop o Illustrator, incluso en Pinterest.

– Hecho a mano, hacerlo en un soporte físico. Aquí tienes infinidad de posibilidades: tablero de corcho, cartulina, pared, pizarra, panel de madera, etc.